Los datos oficiales actualizados al 1° de mayo pasado, consignan que el 70% de la tierra cultivada es arrendada. Asimismo, el 10% de las firmas agropecuarias, concentran la explotación de casi el 60% de la superficie.
Redacción
La Secretaría de Bioeconomía, publicó en sus habituales resúmenes de “Estructura Productiva” un informe con los datos recopilados por el Sistema de Información Simplificado Agrícola (SISA) que controla la AFIP, respecto de la campaña agrícola 2023/2024. En dichos documentos, se consignan la cantidad de hectáreas sembradas y vinculadas a los 37 principales cultivos que se llevan adelante en Argentina.
Según surge de ambas fuentes, algo más de 70.000 productores sembraron 34,3 millones de hectáreas. El análisis menciona que algo más del 70% se esas hectáreas producidas, se realiza bajo el sistema de alquiler o arrendamientos.
El estudio toma en cuenta las últimas seis campañas agrícolas. De ellas se podría establecer un promedio “base” de interpretación. Una especie de “foto” aproximada de la estructura y estratificación de la cadena agropecuaria. Así, promediando, de las 34,5 millones de hectáreas destinadas a cultivo, sólo 10,6 millones fueron cultivadas por sus propios dueños, y el resto, se alquilado. Dicho panorama general habla de algo más de 70.500 productores.
En lo específico a la reciente campaña las hectáreas producidas bajo arriendo alcanzarían según el SISA, algo más de 24 millones de hectáreas. El SISA es un régimen de declaración obligatoria de datos de siembra ante la AFIP.
En cuanto a la estratificación, el informe muestra que los que siembran entre 800 y 3.000 hectáreas, poseen una relación de propiedad de 3 a 1: una hectárea propia y tres alquiladas. Para los que cultivan más de 3.000 hectáreas, esa relación se incrementa a 3,6 a 1.
Reparto de la superficie
Los productores que accedieron a unidades productivas de hasta 50 hectáreas (propias o alquiladas), representaron durante la campaña 2023/2024 el 5% de la superficie cultivada. Los de hasta 100 el 8%; los de hasta 200 hectáreas el 12%; los que sembraron hasta 400 hectáreas son el 16%; los de hasta 800 hectáreas tienen el 17% de la superficie; los de hasta 3.000 hectáreas representan 24% del total; y los de más de 3.000 manejan el 18% de las tierras cultivadas.
En cuanto a qué cantidad de productores participaron de cada estrato, y basándonos en los datos de SISA y Bioeconomía a través de quienes se registran la totalidad de los contratos por campaña. Es importante tomar en cuenta una aclaración que realizan fuentes respecto de los registros y contabilización de productores.
Así, un productor podría registrar varios campos en distintas categorías de extractos, considerando como “casos” a cada uno de ellos. Entonces, la suma de sus cantidades y porcentajes pueden ser mayores a 100%.
De esta manera, podemos visualizar al mismo tiempo, la cantidad de pequeños y medianos productores. Así, establecen que los tenedores de hasta 50 ha alcanzaron el 76,9% de casos. Los de hasta 100 ha, 47,7%; hasta 200 hectáreas, 33,5%; hasta 400 hectáreas, el 18,5% casos.
A partir de aquí, los que se consideran grandes productores, con estructuras empresarias que trascienden la explotación familiar o mediana (equivalente a una pyme), aunque también contiene estratificaciones específicas. Así, explotan has 800 hectáreas alcanzan el 7,5% del total de productores o empresas; hasta 3.000 ha, el 2,6%; y los que superan esa cantidad de hectáreas, el 0,2%.
Hay otros datos adicionales para analizar. Por ejemplo, posando la mirada por provincia, se puede ver la proporción se superficie cultivada arrendada por sobre la explotación en el propio campo. El caso que encabeza es Entre Ríos, con 75,5% de la superficie sembrada ha sido arrendada, seguida por Córdoba, donde casi 75% de la superficie agrícola es bajo alquiler. En el extremo opuesto, se encuentran Chaco, Salta o Tucumán, donde el porcentaje de arriendos gira entre 58 y 59% del total de la tierra cultivada.
En cuanto a una escala promedio de explotación agrícola durante las últimas seis campañas, si existen en promedio 70.750 productores o empresas, y 34,5 millones de hectáreas, la unidad de explotación promedio en Argentina poseería hipotéticamente, cerca de 500 ha.
Por último, vale la pena estimar aproximadamente, cuál es la facturación a nivel nacional de los propietarios de la tierra – los “rentistas” -. Según los informes oficiales y de consultoras e instituciones privadas, el promedio gira en los 300 dólares anuales por hectárea arrendada.
Si a nivel nacional, el arriendo para cultivo alcanza el 70%, implicando al menos 24.043.389 hectáreas, la suma bruta total facturada por los arrendadores se estima en algo más de 7.213 millones de dólares de facturación bruta anual.
Fuente: Secretaría de Bioeconomía / AFIP / Bichos de Campo / Archivo