Abren a la venta el paquete accionario de ARSAT
10 octubre, 2024
La nueva industria Brasil
11 octubre, 2024
ver todo

Algarabía y jolgorio: desde ayer somos un poco más colonia

Gran Bretaña: el invasor que domina nuestros recursos estratégicos. La cosa venía creciendo, pero con la confirmación de la compra de Arcadium Lithium por parte de anglo-australiana con sede en Londres, Río Tinto, la firma no sólo detenta la posición dominante en Argentina, sin que se transforma en un jugador preponderante a nivel global. Hay gobernadores chochos con la noticia, RIGI mediante, proponen la llegada de más ingleses.

Redacción

Aunque al lector le parezca mentira, la noticia provocó un festejo unánime en una enorme porción del arco político. ¿Sabe por qué? Porque, más allá del asunte del RIGI que impulsa el actual Gobierno Nacional, la llegada de empresas extranjeras para que exploten los recursos naturales geopolíticamente estratégicos que son parte del patrimonio del pueblo argentino, fue muy impulsada por el macrismo y por el gobierno de los Fernández Massa.

Según las fuentes, por la suma de U$S 6.700 millones de dólares, la empresa minera con sede central en Londres, Rio Tinto adquirió Arcadium Lithium, lo cual posiciona a la compradora entre las empresas top de la cadena del litio a nivel global. La novedad, dada a conocer ayer miércoles, constituye para los británicos un gran paso en un contexto para las próximas tres décadas que demandará exponencialmente minerales críticos -o geopolíticamente estratégicos, nómbrelos como usted quiera- para la transición energética mundial.

Rio Tinto, al hacerse de los activos de Arcadium, da otros pasos que no están siendo relacionados -o como se dice ahora, “linkeados”-. La firma, ya viene desempeñando en forma directa o a través de subsidiarias y asociadas, la explotación de oro y cobre en nuestro país. Ahora con un importante acceso a las explotaciones de litio, se puede decir que -al menos para Argentina-, la suerte que tenga Río Tinto será la que corra para una buena parte del sector.

Lo anterior es afirmado dentro del propio Directorio de la empresa. Según otra de las fuentes, el director ejecutivo de Rio Tinto, señaló que la adquisición de Arcadium fortalece la capacidad de la empresa para liderar en la producción de materiales esenciales para la transición energética, porque la compra “crea un negocio de litio de clase mundial junto a nuestras operaciones de aluminio y cobre”.

Entre los gobernadores del litio también se escucharon voces de algarabía y jolgorio. Por ejemplo, el mandatario catamarqueño Raúl Jalil, saltaba de alegría en una importante radio de la Capital provincial, e incluso contó que en su reciente visita a Londres había conversado con un importante ejecutivo de Rio Tinto, y ya tenía algún dato respecto de la transacción. Jalil manifestó además, que la operación era “una buena noticia porque es una empresa que exporta aluminio, cobre, y agregaría el litio a su cartera de producción”.

Un cipayo de volumen considerable, que saluda que una minera anglo-australiana se posiciones entre los principales actores globales del sector, y que además posean pleno acceso a nuestros recursos en bruto en Jujuy, Catamarca y Salta. De hecho, Jalil admitió avanzadas negociaciones con la multinacional minera anglosuiza, Glencore.

Argentina, que cuenta con la cuarta mayor reserva mundial de carbonato de litio, y Arcadium (ahora parte de Rio Tinto), opera dos de los cuatro proyectos activos que producen carbonato de litio en Argentina: el proyecto Olaroz en Jujuy y el proyecto Fénix en Catamarca. Estos activos representan una porción importante de la capacidad productiva del país, que se ha triplicado en los últimos dos años, según datos de la Cámara Argentina de Empresas Mineras (CAEM), y según los registros de exportaciones del sector que periódicamente publica el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC).

Previo a la compra de Arcadium, Rio Tinto ya venía proyectando iniciativas en el sector. Se supo por medios especializados que estaba avanzando con la construcción de una planta de 50.000 toneladas de litio en Rincón, provincia de Salta. Supuestamente, es un proyecto que terminó de cerrarse con la implementación del Régimen de Incentivos a la Grandes Inversiones (RIGI); aunque otras voces aseguren que ya venía de tiempo atrás, la decisión corporativa de realizar dicha obra. Sucede que con el RIGI, les conviene más a ellos y menos todavía nuestro país.

Arcadium posee minas y plantas de procesamiento e industrialización de sus extracciones en Australia, Canadá y Estados Unidos. Además, la firma es proveedora internacional de otras grandes demandadoras de sus productos: Tesla, BMW y General Motors. Se estima que para 2030, Rio tinto abarcará el 10% del abastecimiento total utilizado en el mundo de los derivados del litio.

Para cerrar, lo más humillante (sí, siempre se puede un poco más): unos cuantos están muy contentos de que los ingleses tengan tanta suerte en los negocios globales, y que uno de sus estandartes sea Argentina. Según lo manifiestan públicamente, es importante que nuestro país se abra de esa manera, y que a los británicos le vaya bien: “no sea cosa que dejen de tenernos en cuenta”.

Sí, señora lectora y señor lector… Argentina va camino a consolidarse como colonia británica.

Fuente: Rio Tinto / El Ancasti / Infobae / Archivo

Invitame un café en cafecito.app

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *