El foro internacional que está reuniendo a 130 países continuará hasta hoy en Beijing. Encabezada por su mandatario Xi Jinping, el gigante asiático busca además, legitimar la denominada “Ruta Marítima de la Seda”; es decir, la complementación logística del anterior.
Redacción
El presidente de China, Xi Jinping, inauguró ayer el III Foro de la Franja y la Ruta (BRI por su sigla en inglés), al tiempo que recibió a representantes de 130 países, entre los cuales se encuentran 23 mandatarios, como por ejemplo el presidente argentino abdicante, Alberto Fernández, y el chileno, Gabriel Boric.
La Franja y la Ruta, es la denominación que el gigante asiático le otorga a su proyecto de expansión logística global y llegada a los más recónditos mercados del mundo. También nombrada como la “Nueva Ruta de la Seda”, la política internacional china que ya lleva más de una década de desarrollo, incluye un programa de desarrollo global de infraestructuras e integración de mercados internos extracontinentales y de exportación de materias primas, que confluyan bajo el complejo manufacturero industrial de China.
La intención de Xi Jinping según las fuentes, es que el foro contribuya a impulsar su posición como potencia mundial en medio de su pugna con Estados Unidos por la supremacía tecnológica. Además, el contexto convulsionado en Asia Occidental y el este europeo, donde se requiere de China un compromiso por la paz y la contribución a la estabilización de ambas regiones.
Tanto Estados Unidos como la OTAN saben que en Ucrania, desde su apoyo a Rusia, China puede interceder para el cese de hostilidades. Lo mismo que la creciente incidencia de Beijing sobre los países árabes, puede ayudar en el contexto de la masacre que el Estado de Israel está perpetrando sobre Palestina.
Sin embargo, desde el país anfitrión del Foro, formalmente se dedicaron a reimpulsar el objetivo de cooperación y la conectividad entre los países a través de dos componentes, uno terrestre (la Franja Económica de la Ruta de la Seda) y otro transoceánico (la Ruta Marítima de la Seda).
En otro orden de cosas, tuvo bastante trascendencia internacional, la presencia del presidente ruso, Vladimir Putin en el Foro, dado que se trata de la primera visita internacional al gigante asiático desde el comienzo del conflicto bélico con Ucrania.
Por otra parte, tuvo importancia para Argentina la reunión entre Xi y Boric, el presidente chileno. Ambos entiendes que los lazos comerciales entre ambas naciones son fundamentales para la presencia asiática en el Pacífico Sur.
Un comunicado conjunto de Boric y Xi, mencionó la lista de áreas de cooperación, desde economía, energía, educación, cultura, turismo, tecnología, agricultura e infraestructura hasta minería, puntualmente la del litio. He aquí la importancia para nuestro país: en el marco de la reunión, se anunció una inversión “de más de 250 millones de dólares” por parte del grupo chino Tsingshan, para explotar el litio en la zona norte de Chile.
Por último, el presidente abdicante de Argentina, Alberto Fernández, tras participar durante varios días en otras localidades del país, llegó a la capital china para participar del Foro. Previo a ello, se había reunido en Shangai con la titular del Nuevo Banco de Desarrollo de los BRICS (NDB), Dilma Rousseff, para iniciar el proceso de adhesión de Argentina a ese organismo.
La propia funcionaria confirmó a medios internacionales que Argentina presentó la documentación requerida, y que será analizada por el Consejo de Administración del Banco”.
Fuente: Télam / NBD / CCTV