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Dos variedades de caña de azúcar fueron desarrolladas por INTA y ya estarían autorizadas por INASE para poder explotarse. Diseñada en Tucumán, se trata de dos variantes de la especia que tendrían mayor rendimiento y mejor perfil de industrialización.

Redacción

Investigadores del Programa de Mejoramiento Genético de Caña de Azúcar del INTA Famaillá, provincia de Tucumán, obtuvo dos nuevas variedades ya autorizadas e inscriptas para su uso comercial: INTA NA 03-663 e INTA NA 03-617. Según se comunicó desde el organismo, ambas poseen un rendimiento de entre 70 y 85 toneladas por hectárea.

El cultivo de la caña de azúcar en Tucumán ocupa alrededor de 300 mil hectáreas, y se desarrolla en tres zonas con tipos de suelos particulares entre sí: el pedemonte, parque chaqueño y llanura deprimida. Los científicos de INTA mencionaron que lo que buscaron eran variedades que pudieran adaptarse a los tres ambientes y tener rendimientos similares.

Las dos nuevas variedades ya se encuentran inscriptas en el Instituto Nacional de Semillas (INASE), y ya están implantadas en los campos productivos con un período óptimo de cosecha de mayo a agosto.

Desde la entidad, especificaron que esta variedad de caña de azúcar exige “más suelo”, pero como compensación posee mayor precocidad madurativa. Es decir, al inicio de la zafra entre mayo y junio, reúnen condiciones de buen rendimiento fabril y potencialidad de cantidad de azúcar.

La estrategia de INTA Famaillá es procurar proveer al sistema productivo de variedades de caña de azúcar “de elevado rendimiento cultural y fabril, resistencia a las principales enfermedades que atacan al cultivo y con adaptación a las diversas condiciones climáticas que abarca este cultivo en el país”.

Entre las variables que se toman para evaluar los mejores cultivares son rendimiento, maduración temprana, tolerancia a plagas y enfermedades, adaptación a las condiciones agroecológicas locales​, tolerancia a factores abióticos (sequía, heladas, salinidad)​, adaptación a la cosecha mecanizada​, longevidad de la cepa​, porte, resistencia al vuelco, entre otros.

En cuanto a plagas y enfermedades, las variedades presentadas, serían tolerantes a estría roja, mosaico, escaldadura de la hoja y carbón; asimismo, medianamente susceptible a raquitismo de las socas y medianamente tolerante a roya marrón.

Fuente: INTA

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