Por Decreto, fueron publicadas las nuevas alícuotas del DEX para más de 150 productos y derivados. Los nuevos parámetros entran en vigencia mañana 1° de agosto.
Redacción
En la madrugada de hoy a través del Boletín Oficial, el Gobierno Nacional publicó el Decreto 526/2025 con el cual formalizó el anuncio realizado por el presidente Milei respecto de la baja de las alícuotas a los Derechos de Exportación (DEX), conocidos coloquialmente como “retenciones”. La medida alcanza a los productos mencionados por el mandatario y derivados adicionales, que constan en el anexo de la norma.
Los cambios más esperados por el sector son los siguientes:
Soja: el poroto baja de 33% a 26%;
Harina y aceite de soja, de 31% a 24,5%
Maíz y sorgo: del 12% al 9,5%.
Girasol: del 7% al 5,5%.
Carnes bovinas y aviares: de 6,5% a 5%; aunque la categoría vaca permanece en 0%.
Trigo y cebada: rebajas permanentes al 9,5%.
Animales vivos: 3,5%.
Harina de trigo: 5,5%.
Harina de maíz: 4%.
Malta: 7%.
Embutidos porcinos: exentos
Entre las novedades complementarias de la norma, se observa que la misma se canalizó a través del Código Aduanero Común del MERCOSUR, cosa que le permite al Ejecutivo Nacional no tener que someter la iniciativa al aval del Congreso.
Asimismo, el texto del Decreto no establece plazos de vigencia. Por lo tanto, las nuevas alícuotas quedarían fijas hasta una nueva modificación. La inquietud que presentó un segmento del sector agropecuario, es que nada les asegura que -vía otro Decreto- las retenciones puedan ser aumentadas nuevamente.
Con esta medida -que entra en vigencia mañana 1° de agosto-, el Gobierno comienza a cumplir con parte del acuerdo que posee con la Mesa de Enlace y los mandantes en el complejo agropecuario. Desde la Rosada alegaron que es una forma de “acompañar al agro con reglas claras y previsibilidad”.
Cierto es también que el grueso de las exportaciones -casi 50.000 millones de dólares anuales- proviene de dicha actividad. Tres cuartas partes de esa suma proviene del comercio de granos, subproductos y carnes. Es por lejos, el vector económico de escala internacional con el cual Argentina puede relacionarse con el mundo, al resignar todo atisbo de desarrollo industrial soberano.
Aunque deteriorado y en franco descenso, allí radica todavía el poder de la Sociedad Rural.
Fuente: B.O. / NAP / BdC