A comienzos de semana, los diferentes actores vinculados a la producción de tabaco, en conjunto con autoridades provinciales acordaron un precio de referencia para la presente temporada. Inquietud por el futuro del FET.

Redacción

El pasado lunes la cadena tabacalera de Salta y Jujuy fijó precio para la clase referencial B1F Virginia en 2.820 pesos el kilo. El mismo, consiste en un incremento al precio vigente de casi el 350%.

De la reunión llevada adelante en Salta, participaron autoridades de los gobiernos de ambas provincias y representantes de los productores y la industria tabacalera, entre ellas la Cámara del Tabaco de Salta y Jujuy, COPROTAB, Cooperativa de Tabacaleros de Jujuy, Massalin Particulares y Alliance One.

Según la fuente, hubo dos empresas no habían firmado el acuerdo por el precio, aunque sí lo refrendaron las dos cámaras de tabaco y las dos cooperativas que representan la mayoría del mercado.

Si bien no era el precio esperado por los productores, el incremento fue definido como “significativo”, al pasar de algo más de $ 805 a $2,820, es decir un equivalente según el tipo de cambio actual de 3,30 dólares por kilo.

La preocupación de los productores tiene asidero: las dificultades reinantes en el Fondo Especial del Tabaco (FET), que tradicionalmente “compensaba” las diferencias entre el precio fijado en las negociaciones y las pretensiones del sector primario, ahora se encuentra en el terreno de la incertidumbre fundamentalmente por el aumento del comercio ilegal y la evasión de impuestos.

El precio acordado, cubriría los costos inmediatos del sector productivo, aunque deja un horizonte a futuro escaso de precisiones habida cuenta de la situación del país, y la matriz de costos que posee la actividad.

El Tabaco Virginia es altamente valorado en el mercado nacional e internacional y su producción genera importantes ingresos para las provincias de Salta y Jujuy. De allí la razón para que el valor del kilo de hoja puesta en las platas de acopio fuese suficiente para afrontar el resto del año, y fundamentalmente financiar la campaña que viene.

La ventaja de coyuntura en la coincidieron todos los actores vinculados a la negociación, es que, a diferencia del año pasado, las retenciones por exportación del tabaco poseen alícuota cero; lo que genera que las empresas comercializadoras no trasladen el factor impositivo hacia el sector productivo.

Por último, se informó que el precio acordado comenzó a regir desde ayer – martes 27 de febrero -. Restaba saber cómo sería el mecanismo para el pago retroactivo a los productores por la mercadería ya entregada en la presente campaña.

Fuente: Tabaco Argentino / AgroNOA