Parece que picó la idea de reflotar de verdad, el ferrocarril de cargas en la provincia de Buenos Aires y el protagonismo de Puerto Quequén. El Tren Patagónico ya arrancó llegando a Bahía. El pensamiento “mágico” del complejo exportador multinacional con asiento en Rosario y el capricho sobrenatural de las cargas.
Redacción
El tema logístico vinculado al complejo agro industrial de exportación está candente en Argentina y la provincia de Buenos Aires parece querer redoblar la apuesta en la discusión y reflotar ramales ferroviarios.
Tal es así que el Gobernador Axel Kicillof, estaría dispuesto a recoger el guante y terciar ante el Ministro de Transporte de la Nación, Diego Giuliano, para que se reconsidere la posibilidad de reactivar el tren de cargas que uniría Olavarría en el centro provincial hasta Puerto Quequén, pasando por Tandil y Lobería.
La iniciativa viene siendo impulsada por varios sectores del interior bonaerense, donde el ferrocarril es uno de las reivindicaciones más preciadas de todo el arco político. Kicillof se hizo eco más que nada de las distintas manifestaciones de varios intendentes del radicalismo, como por ejemplo, el loberense Juan José Firamonti, o el tandilense Miguel Ángel Lunghi.
Más allá de las coyunturas electorales que intentan acercar al Gobierno provincial con un sector de la oposición, la reivindicación del ferrocarril es una bandera que unifica prácticamente a todos los intendentes del Centro, Sudeste, Sudoeste y Sur provincial. Regiones que al sur del Salado – salvo por las ventajas de los puertos marítimos – están más emparentadas con los desequilibrios generales que padecen las otras provincias periféricas a la zona núcleo.
La vuelta del ferrocarril permitiría achicar costos hasta en un 40% en materia de fletes, e inclusive poder pensar abaratar significativamente la operatoria logística. Es decir: flete, maniobra y almacenamiento.
Como dijimos, el proyecto no es nuevo, ya que varios municipios se vienen haciendo gestiones ante distintos organismos para darle impulso y además, es materia de coincidencia con cooperativas y cámaras de productores, distintos actores del agro y organizaciones políticas populares, como el Plan Director Ferroviario que impulsa el Movimiento de Liberación Nacional (MLN); o bien, la Asamblea Popular por la Soberanía de Puerto Quequén.
Ya durante el mes de mayo, los intendentes de Necochea, Tres Arroyos, Lobería, Balcarce y Ayacucho se habían reunido en Tandil junto con legisladores provinciales y representantes de distintas dependencias del Estado, para avanzar en el proyecto. Incluso se había convocado a instituciones como el Instituto nacional de tecnología Agropecuaria (INTA), para que colabore con información y datos que permitan dimensionar la potencialidad de manejo de cargas que tendría la recuperación de la traza.
La misma, no sería propiamente la recuperación de un ramal en particular. El ingreso ferroviario a Puerto Quequén, se realizaba décadas atrás a partir del enlace y combinación de varios ramales interconectados que atravesaban la provincia como el Ferrocarril Provincial y el General Roca.
La dificultad actual se observa en el potencial recorrido que pueda realizar el tren, fundamentalmente en la unión entre Olavarría y Tandil. Entre esta última y la ciudad de Azul, el ramal fue levantado, por lo cual habría que reconstruirlo y ponerlo en funcionamiento (los terraplenes, drenes, y cotas están en buen estado a pesar del tiempo que llevan pasados a desguace). Desde la ciudad serrana hasta Quequén habría que reactivar el trazado.
Otra opción es hacer una “vuelta” hacia el sur, que implica algunos kilómetros más de recorrido entre Olavarría y Tandil, pero que abarcaría una mayor cobertura. Los ramales se encuentran inactivos entre Querandíes y Chillar, y parcialmente activos entre esta última y Tandil.
De ambas formas es viable, siempre y cuando esté la decisión política de llevar adelante el proyecto; y la región le daría – en principio – pleno acompañamiento.
La oposición rosarina
Los intereses que pugnan desde hace décadas porque la idea de reactivación ferroviaria del sudeste bonaerense sea extirpada del imaginario popular, es el complejo exportador multinacional asociado al puerto de Rosario.
De hecho, los “especialistas en el tema” – a sueldo de la Bolsa rosarina, expresaron públicamente cuando trascendieron las intenciones de Kicillof, los intendentes y las organizaciones, que el proyecto impulsa “una ruta alternativa de no mucha importancia para la carga».
Tales argumentos se apoyan en la lógica actual de la operatoria exportadora de cargas a granel de origen agropecuario: los puertos de Quequén y Bahía Blanca son utilizados por los buques cuando en los puertos de San Lorenzo, Timbúes o Puerto San Martín no pueden completar la carga por falta de calado y deben terminar de llenarlas en estos puertos.
Cuando esto sucede, el costo logístico se incrementa, y es trasladado indirectamente al productor. Tema que era de debate cotidiano, con las grandes bajas de caudal de la cuenca del Paraná entre 2020 y 2022. Además, también existen maniobras de “vaciamiento” de tránsito de cargas hacia estos puertos marítimos, como parte de las triquiñuelas de encarecimiento logístico, los seguros y comisiones.
El razonamiento además, de cara a encubrir operaciones no muy claras, contrabandos varios, y avivadas en las liquidaciones, parte de una idea “mágica” de que “las cargas se comportan por sí mismas”, como si los campos se cosecharan solos y los medios de transporte fueran todos familiares de “El Auto Fantástico”.
El ramal Viedma – Bahía volvió a caminar
Durante el pasado fin de semana fue restaurado tras 28 años de interrupción, el servicio de Tren Patagónico de Carga, que une Bahía Blanca y Viedma.
La recuperación del tramo representa además, la inminente reactivación de la unión por ferrocarril de la línea Constitución (Capital Federal) – San Carlos de Bariloche (Río Negro). Es decir, añadir 1.000 kilómetros al recorrido ferroviario que cesó su funcionamiento en 1995, con la privatización de las líneas ferroviarias.
La intención en principio es la puesta en marcha de dos servicios de carga semanales, que cobren cierta regularidad en los próximos 60 días. Además, la empresa rionegrina – Tren Patagónico -, proyecta avanzar con los convenios en las intendencias de las localidades ubicadas entre Viedma y Bahía Blanca, para iniciar con un servicio de encomiendas a bajo costo.
Fuente: Gobierno Pcia. de Buenos Aires / Tren Patagónico / Archivo Chasqui Federal