En el marco de la conmemoración provincial de sus derechos sobre dicha cuenca, el gobernador Ziliotto realizó una serie de declaraciones que apuntan a Mendoza por el incumplimiento del fallo de la Corte.
Redacción
Cada 21 de octubre se conmemora en la provincia de La Pampa, el “Día de la Reafirmación de los Derechos Pampeanos sobre el Río Atuel”. En ese marco, el gobernador Sergio Ziliotto, apuntó contra Mendoza y sostuvo que siempre se renueva el compromiso por los derechos de su provincia.
Según palabras del mandatario, su gestión renueva “el compromiso por esta lucha irrenunciable por nuestros derechos, por nuestro ambiente, y por nuestra gente. El fallo de la Corte Suprema es claro: Mendoza debe devolver a La Pampa el agua que nos robó».
Como se viene dando cuenta en las páginas de Chasqui Federal, Ziliotto recalcó que el “incumplimiento persiste”; y calificó al conflicto como una “batalla por la justicia y la equidad” en un marco que trasciende la cuestión provincial.
El gobernador agregó que “la falta de voluntad no nos detendrá. Continuaremos firmes hasta que el Atuel vuelva a correr por nuestro territorio, como siempre debió ser. La Pampa trabaja incansablemente para proteger sus ríos y cuidar sus recursos hídricos, no solo por el presente, sino también por las futuras generaciones».
El conflicto entre La Pampa y Mendoza por las aguas del Atuel lleva décadas de desarrollo. Más allá de las acciones judiciales mencionadas, ambos territorios pugnan por sus intereses y las dos consideran sus acciones como legítimas.
Desde aquí, se entienden un par de factores fundamentales para la resolución del problema entre dos provincias hermanas.
Por un lado, una provincia o puede coartar el acceso a un curso de agua a las provincias y territorios que se encuentran “aguas abajo”. Es antinatural en términos meramente ambientales; y anti federal en términos políticos.
Eso no quita que Mendoza -en este caso- no pueda y deba utilizar las aguas de dicha cuenca para sus necesidades. Sin embargo, debe tenerse en cuenta que La Pampa, al no contar con las aguas del Atuel, sufre un déficit hídrico de carácter estructural que compromete la supervivencia no sólo de su sistema productivo, sino fundamentalmente de la población.
Sabemos lo que dice la Constitución Nacional respecto de los recursos naturales. También tenemos criterio respecto de lo que podemos denominar federalismo de signo positivo o de signo negativo. El primero, sirve a ambas jurisdicciones en colaboración y complemento. El segundo, perjudica a una de las provincias en forma determinante.
La solución será de conducción federal, donde se comprenda entre las distintas provincias, que los temas estratégicos de toda la Nación, no pueden depender de la relativa posición de poder de una provincia sobre otras.
Ya hemos tenido bastante de eso en nuestra historia.
La justo pasa por la conducción del sistema de aguas entendiéndolo en forma integral, con lo especifico de cada cuenca y los actores que la habitan. Está claro que el Atuel tiene una problemática y el Bermejo otra. Pero el marco de un federalismo conducido por la concurrencia mutua sería mejor que la supervivencia del más fuerte.
Fuente: Gob de La Pampa / Archivo