Gonzalo Eduardo Bacigalupo, empresario dedicado a la exportación e importación de productos pesqueros fue designado a cargo del organismo. ¿Experiencia en las ciencias del mar o del negocio pesquero? Ninguna.

Redacción

Se conoció finalmente quién será el funcionario gubernamental que estará a cargo del Instituto Nacional de Investigación y Desarrollo Pesquero (INIDEP). Se trata de Gonzalo Eduardo Bacigalupo, empresario dedicado a la exportación e importación de productos pesqueros, sin experiencia directa en la actividad productiva de la cadena, y menos aún en el área de investigación, prospección, identificación conservación y planificación del recurso pesquero.

Bacigalupo dirige “Bacimar”, empresa que exporta e importa productos tales como merluza negra, langostino, calamar, corvina.

Sin antecedentes en el rol que debe ocupar, aparentemente la “condición” estipulada dentro del Consejo Federal Pesquero (CFP), es que si el gobierno nacional designa a un actor del mercado externo a cargo del organismo científico más prestigioso del Atlántico Sur, las otros sillas del CFP exigieron el retorno de Otto Wöhler para ocupar la Dirección Nacional de Investigaciones como para tener el respaldo de un científico reconocido entre sus pares.

Dentro del ambiente pesquero existen discrepancias fuertes en torno a Wöhler, que viene de la época en que este estuvo a cargo del organismo. Particularmente se lo acusa de haber infringido normas relativas a las contrataciones de personal de marinería (para los buques de prospección y explotación), como también por ser quien impulsos los acuerdos supuestamente fraudulentos con los créditos del BID, para la compra de los buques Angelescu y Mar Argentino, durante los gobiernos de Néstor Kirchner y Cristina Fernández.

Aparentemente, la razón habría deriva de las (no) buenas reacciones que habría dejado como saldo la designación de Basigalupo. Dicen en los distintos nodos de la cadena pesquera, que el nombramiento combina con una política pesquera de protección y benevolencia para los amigos como el caso de Prodesur (merluza negra pescada ilegalmente), y que para el INIDEP ha tenido solo ajuste presupuestario y recorte de personal.

Otra objeción fuerte, es que el nuevo director no cumpliría con lo que establece la propia ley de creación del organismo., donde dice claramente que el Director deberá ser un profesional con título universitario en alguna disciplina vinculada con las ciencias del mar.

Sin embargo, el nuevo funcionario fue parte de JP Klausen, otra empresa comercializadora de pescados y mariscos; y antes de la pandemia, primero fue consultor y luego manager de Pesquera San Arawa.

Fuente: CFP / INIDEP / Revista Puerto