Se dio a conocer información específica de los principales sectores productivos vinculados a la agricultura regional correntina. Salvo en la yerba mate, todos los demás índices arrojaron números negativos al 31 de diciembre pasado.

Redacción

Datos y quejas desde Corrientes. Son semioficiales porque el Gobierno provincial no los confirma. Pero tanto INDEC como la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) – que arma sus números en función del primero -, aseguran que en 2022 las principales producciones correntinas se vieron muy perjudicadas en materia de ventas al exterior. Así, las exportaciones de arroz cayeron -2,4% en dólares; las foresto-industriales -10,4%; y de cítricos -2,8%.

Salvo la yerba mate, para las cuales las ventas externas aumentaron un 33% (de allí se explica el aumento sideral de ese producto para la familia argentina), el resto se vino a pique. Según los documentos, el complejo yerbatero vendió cerca de 40 mil toneladas por 87 millones de dólares; arrojando el porcentaje mencionado de aumento.

Sin embargo, el arroz tuvo por un lado una caída en precio internacional y por otro en volumen. Facturó 176 millones de dólares; y exportó 411.130 toneladas (1,6% menos que en 2021). La cadena forestal por su parte, vendió por 228 millones de dólares un total de 374.445 toneladas. Volumen que implica más de un 20% menos que el año anterior.

Los cítricos son los que reflejan más claramente la situación por ser al mismo tiempo uno de los vectores productivos principales de Corrientes: tuvo una caída de volumen de exportaciones del 13,5% (526.475 toneladas); con una caída en la facturación de casi el 3% (U$S 668 millones). Es decir, el precio aumentó un poco en relación al año anterior, pero con una pronunciada caída en cantidad de ventas.

Los productores levantan las mismas quejas que sus pares del resto del país: tipo cambiario, reclamo de créditos al sector, eliminación de carga impositiva; fomento de apertura de nuevos mercados externos; y la supuesta no viabilidad de volcar sus ventas al mercado interno, dados los altos costos de producción y la baja capacidad de consumo de la familia argentina promedio. Si no exportan, no es negocio.

Fuentes: INDEC / CAME