En Jujuy se vuelve a apostar al Corredor Bioceánico “Capricornio”. Tras su adhesión al RIGI y la ley específica que busca fomentar esa vía logística, el empresariado provincial busca posicionarse en el mercado internacional a través de la prestación de servicios a las cargas externas.
Redacción
En el marco del impulso otorgado desde el Gobierno provincial con la adhesión al Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI), y la sanción de la Ley N° 6408 que creó el Consejo de Desarrollo y Promoción del Corredor Bioceánico de Capricornio, con incidencia público-privada, se realizó días atrás en Jujuy un encuentro organizado por el Consejo Profesional de Ciencias Económicas, titulado “Corredor Rodoviario Bioceánico: Nuevo Motor de Crecimiento en el NOA”.
Uno de los principales exponentes de dicho evento fue uno de los ejecutivos más importantes del grupo Ledesma y, al mismo tiempo, presidente de la Unión Industrial de Jujuy, Federico Gatti.
El empresario insistió que se deben trabajar especialmente, el tramo de 500 kilómetros de la traza jujeña del Corredor que unirían a la provincia con el resto de la región. Desde el punto de vista de Gatti, la Cancillería Argentina debe involucrarse en el tema para darle mayor proyección a lo que pueda llevar adelante la propia provincia y el sector privado interesado.
La expectativa con la cual se “vende” y promociona el proyecto que data desde la década del ’90, es que la mayor infraestructura, implicará eficiencia logística, competitividad e integración regional entre Brasil, Paraguay, Argentina y los puertos del norte de Chile. En el camino, Jujuy cuenta con una posición estratégica.
En el encuentro se recordó asimismo, que en 2015, los gobiernos de los cuatro países firmaron la “Declaración de Asunción” que dio origen al llamado “Corredor Bioceánico”. El objetivo aparente era llevar adelante una proyección regional para colocar los productos de toda la región que abarca el Corredor en los mercados del Asia Pacífico. La decisión fue reforzada con la recordada “Declaración de Brasilia” en 2017.
Los grupos de trabajo derivados de estas declaraciones, debían avanzar en una traza estratégica desde Campo Grande y Puerto Murtinho (Brasil); pasando por Carmelo Peralta, Mariscal Estigarribia y Pozo Hondo (Paraguay), continuando por Misión La Paz, Tartagal, Jujuy, Salta (Argentina); los pasos de Jama, puertos de Antofagasta, de Mejillones e Iquique (Chile), sumando además el paso de Sico. Sin embargo, los avances entre los cuatro países no fueron parejos.
Sin embargo, en el NOA la iniciativa no había logrado hacer pie hasta el momento, hasta que los encuentros de este año entre los gobiernos norteños con Nación reavivaron la agenda. Las mencionadas leyes sancionadas por la Legislatura jujeña ampliaron el espectro de acción. Ahora, se dice que “el mercado asiático aguarda este paso para el intercambio más fluido de productos, con capitales enfocados en esta región”.
Gatti sostuvo que “desde Ledesma y desde el mundo industrial es positivo que se haya tomado, a través de una ley, la importancia que el Corredor tiene para Jujuy”. Recordó que durante mucho tiempo el sector privado concurrió a las reuniones de la Zona de Integración del Centro Oeste de América del Sur (Zicosur) y del Corredor del Capricornio, sin el éxito esperado. “Por ahí no teníamos un acompañamiento del sector privado, que sí había en otras provincias que no tienen la dimensión que tiene Jujuy”, prosiguió el dirigente empresarial.
Gatti repasó que 500 kilómetros de este corredor pasan por esta provincia, atravesando Yungas, Valles, Quebrada y Puna. A su entender, la importancia de este circuito impacta en la producción, el turismo, en grandes desafíos logísticos y de desarrollo para las ciudades vinculadas a las rutas 34, 9, 63 y 52.
“Lo primero es ponerse de acuerdo, priorizar cuáles son los trazos que hay que hacer. Hay que convencer y trabajar con Cancillería Argentina para que le dé la importancia que este tema tiene, y que así es en otros países que tienen una continuidad en cuanto a su política exterior, como Brasil, Paraguay, Bolivia. En Argentina, a través de los cambios de gobierno y los bandazos de política exterior no lo veníamos desarrollando”, aseveró Gatti.
“Tenemos que tener reuniones con la Cancillería y con el Ministerio de Relaciones Exteriores para que tengamos el acompañamiento por parte del sector público nacional y priorizar inversiones, priorizar trabajo y ponernos a trabajar”. Para Gatti, Jujuy debe facilitar que el tránsito bioceánico y brindar servicios al trasporte de cargas.
“Que los pueblos, los municipios empiecen a tener algún tipo de incentivo, y que eso también desarrolle el turismo que ya está en la Quebrada y es incipiente en la zona de Valles, Puna y Yungas. Hay mucho potencial para hacerlo y creo que este corredor puede ser una gran herramienta”, finalizó.
Más allá de cómo se terminen de desarrollar los acontecimientos, el plan y el rol argentino en el Corredor sería el mismo que se viene proponiendo desde otros sectores que también participan o pretenden hacerlo desde Jujuy u otras provincias: que nuestro país exporte materia prima sin valor agregado; que brinde servicios al tránsito de cargas generadas en otros países; y que se organice infraestructuralmente para el intercambio con China. Es decir, ser receptor de manufactura industrial terminada.
Fuente: Jujuy Económico