Política no es subordinación, la política tiene que constituirse como un instrumento de acción de la soberanía de una Nación, ese es el legado histórico de la Argentina.
Por Diego Chanuar*
Planificar la acciones contra el sistema financiero internacional son perfectamente viables para una Nación como la Argentina que posee capacidad de autoabastecimiento en alimentos, energía y medicamentos.
Que posee capacidad industrial por recursos, riquezas e infraestructura; con potencial en tecnología nuclear y electrónica; con una geografía que se constituye como la octava nación con mayor superficie del planeta, con una plataforma continental que es reserva de recursos ictícolas.
Una Nación con derechos fehacientes sobre el continente antártico y con capacidad de desarrollo de dominio del espacio aeroespacial. Sólo siete naciones tienen capacidad de desarrollar tecnología satelital geoestacionaria.
En fin, herramientas políticas industriales, territoriales, sociales que perfectamente pueden constituirse como la base económico-financiera y de fortalecimiento monetario de la Nación.
Evidentemente el pueblo argentino se encuentra rendido, abatido, desconcertado y temeroso frente a las posibles consecuencias de un conflicto político contra quienes vienen haciéndonos mierda hace casi medio siglo.
No reconocer que cualquier acuerdo con Satanás es peor que pelear, es simplemente caer en un error que nuevamente nos subordinará por veinte años más.
Integrante de Social 21, La Tendencia
Fuente: Social 21, La Tendencia