El legal y el tecnológico. Dos paquetitos que avanzan año a año con el objetivo de homogeneizar el criterio, el territorio y la concepción de producción, propiedad agraria, y cadena de valor en Nuestra América.

Redacción

Los grupos y medios de presión de la cadena global agropecuaria presionan e imponen condiciones permanentes sobre Nuestra América. De hecho, está circulando un informe donde se promociona la sumisión continental hacia el mercado global del sector.

La consultora norteamericana AgriBusiness Global DIRECT, difundió una serie de informes donde se hablan maravillas sobre la concentración del segmento semillero. Según la firma, Nuestra América se erige como “un mercado en auge para los cultivos genéticamente modificados (GM)”. Por lo tanto, Brasil, Argentina y Paraguay encabezan la producción de cultivos transgénicos, buscando incrementar los rendimientos y la resistencia a plagas y enfermedades.

Con este panorama, el mercado de semillas en América Latina se caracteriza “por su alta competitividad”. Según AgriBusiness, empresas multinacionales como Bayer, Syngenta y Corteva Agriscience dominan las cadenas sectoriales, y dedican importantes recursos a la investigación y desarrollo de nuevas variedades de semillas capaces de enfrentar diversas condiciones climáticas y enfermedades.

Obviamente, la nota apunta a generar más y más lobbys y presión, de cara a que los gobiernos de continente aprueben y homologuen los distintos proyectos de ley que apuntan a la protección de la propiedad intelectual respecto de las semillas. Las empresas declaman que la carencia de regulación sobre el tema “obstaculiza la innovación e inversión en investigación y desarrollo”; además de que los países de la región poseen distintos criterios y la falta de homogeneidad dificultan “la operatividad de las empresas”.

En criollo, las multinacionales – las nombradas y otras que aún no lo hicimos – pretenden que las naciones de Nuestra América, adopten conjuntamente un “paquete legislativo” que asegure, consolide y resguarde por igual en todo el continente, el “paquete tecnológico agropecuario”.

Los ejes de trabajo que se han propuesto las semilleras son, la formación un mercado de semillas en América Latina – que continuará su crecimiento en los próximos años -, dada la creciente población de la región y la demanda de alimentos, unidas a condiciones agrícolas propicias; y la adopción de tecnologías avanzadas como la agricultura de precisión y la agricultura digital.

Fuente: AgriBusiness / Agrolatam