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«Un cuadro vale más que 20 diputados»

Reproducimos el artículo publicado por Juan Godoy* titulado “Marino Vuelta: Ejército y Resistencia Peronista”, donde se realiza – al mismo tiempo que homenajea a ese compañero de la resistencia peronista -, una reflexión respecto del rol de las Fuerzas Armadas en América Latina y su relación con los Movimientos de Liberación Nacional.
Redacción
El anti-militarismo abstracto aparece como un eslabón fundamental de la cadena de ideas propagadas por los diversos mecanismos de coloniaje invisibles para robustecer el dominio de los países dependientes, y su postración económica, enmarcado en la matriz iluminista rechaza cualquier otra función de las Fuerzas Armadas que no sea su ubicación como brazo armado de la clase dominante.
Basta recorrer la historia de Nuestra América en general y de la Argentina en particular para dar rápidamente por tierra a esta idea, ya que si bien tuvimos militares verdugos de su pueblo y aliados a las potencias imperialistas, también tuvimos patriotas que levantaron las banderas del nacionalismo popular, de la necesidad de la industrialización como jalón de la independencia económica y la soberanía nacional, como asimismo en el avance del establecimiento de los puntales donde asentar la defensa de la patria en forma profunda, etc.
Así, por ejemplo, las Fuerzas Armadas cumplen un papel fundamental en el peronismo, tanto en su concepción y nacimiento, como en su desarrollo. Asimismo, en los cuarteles se cuentan por miles los que adhieren al peronismo. Tuvimos, no resulta casual entonces, gran cantidad de militares leales que no dudaron en integrarse a la resistencia peronista. Uno de estos casos es el que nos interesa reseñar aquí, se trata de un militar que se comprometió con la causa nacional y con la lucha de nuestro pueblo: Marino Vuelta.
Nacido en junio de 1924 en la ciudad de 9 de Julio, provincia de Buenos Aires, par de una familia numerosa, son ocho hermanos, dos de los cuales fallecen tempranamente. Se casa en el año 1957. Padre de dos hijos (uno nacido en el 58 y otro en el 60). Fallece el 15 de agosto del 2011 en la Ciudad de Buenos Aires.
Marino Vuelta, con poco más de 20 años, es testigo del 17 de octubre de 1945, al que considera certeramente como un hecho revolucionario único en la historia del mundo. Impactado por ese “subsuelo de la patria sublevado”, apoya tempranamente al peronismo, e ingresa en esos años al Ejército. Su carrera militar lo lleva a ser Sargento primero y luego Sub-oficial de la fuerza. Allí aprende el oficio de talabartería. Amante del deporte, también se desempeña en la Liga de Básquet de Mar del Plata.
Luego del derrocamiento del peronismo, aparece en la trinchera de la Resistencia Peronista. Militante activo de la misma, es fundador del núcleo de la Movimiento Peronista de Base en Mar del Plata. Comparte militancia, entre otros, con Pedro Álvarez, el «Vasco» Altuna, René Isúz, Jorge Rulli. Amigo íntimo de Norberto Centeno (Abogado defensor de los derechos de los trabajadores, y detenido-desaparecido en la “noche de las corbatas”, durante última dictadura, en el 1977). Contribuye en el armado del peronismo de base en La Plata, Rosario y Buenos Aires.
Por esta militancia en los años del Plan CONINTES (recordamos durante el gobierno de Arturo Frondizi), es detenido en la segunda quincena de marzo de 1960, bajo el cargo de “actividades subversivas”. Pasa 3 años, 3 meses y 28 días preso, recorriendo numerosas unidades penitenciarias, en las que es sometido a torturas, entre las cuales está la Base Naval de Mar del Plata, la de Magdalena, y Ushuaia. Dado de baja del ejército, una vez que es liberado redobla el esfuerzo militante, a pesar de las amenazas que recibe para que no lo haga más. Preocupado porque el peronismo perdure a través del tiempo dedica importante parte de sus esfuerzos, además de a la organización de los núcleos de la resistencia por la vuelta de Perón, a la formación de los militantes ya que considera que la formación de «un cuadro vale más que 20 diputados».
En los tempranos 70 recibe carta desde España de Juan Perón en relación a la organización de la Resistencia, da charlas, conferencias en locales políticos, universidades, etc. Traba relación con varias de las organizaciones del peronismo revolucionario. Integra la Comisión por la Repatriación de los restos de Eva Perón en Mar del Plata. Participa en las manifestaciones cuando Perón regresa a la Argentina, y en los festejos populares por la asunción de Cámpora, y luego de Perón. Durante la Gobernación de Oscar Bidegain organiza una cooperativa en Sierra de los Padres, donde trabajan la tierra y reparten luego los alimentos que siembran. Cuando la Gobernación de Victorio Calabró, la misma es desactivada.
En octubre de 1974 lo quieren secuestrar, pero se salva huyendo con su mujer y sus hijos por el patio trasero de la casa. Por las persecuciones, a partir de esa fecha, y más aún con el advenimiento del golpe de estado del ’76, se mudan reiteradamente, a la Ciudad de Buenos Aires, Laferrere, Córdoba (Carlos Paz, Villa Berna, Calamuchita). En 1979 lo van a buscar las patotas militares a la casa de su suegra, donde no se encontraba. En esos años trabaja como corredor para poder sobrevivir.
Con el regreso a la democracia, participa de las convocatorias contra los levantamientos militares, en los años 90 se desencanta rápidamente del menemismo ante la entrega de la nación, y a partir del año 2003 expresa un “apoyo crítico” a las gestiones kirchneristas, y al proceso de cambio en Latinoamérica.
Peronista revolucionario, luchador incansable por la liberación nacional, anti-imperialista, y latinoamericanista le envía una carta al Comandante Chávez con motivo de la Cumbre de los Pueblos contra el ALCA en noviembre de 2005 en Mar del Plata. Marino expresa allí su pensamiento: “USA tendrá que aceptar y asumir que es un país despótico confuso en medios y fines sin autocrítica y revisiones (…) Presidente de los americanos del NORTE, las naciones del Sur no precisan presiones ni monitores directos e indirectos, desde el FMI, BM, ONU, OEA (…) La presencia de Bush en la cumbre de Mar del Plata, es una provocación política de corte imperial ante el rechazo de los pueblos que ven e intuyen imposiciones para el sometimiento político, económico (…) Los del sur del Río Grande precisamos una nueva categoría de dirigentes, en doscientos años sólo tuvimos a Perón, Arbenz, Castro, Chávez y unos pocos más, todos estos cuestionados por USA, e invocando la democracia y sus virtudes, tendrá que revisar su éxito democrático, porque tiene cuarenta millones de ciudadanos bajo la línea de pobreza y setenta millones patinando sobre la misma línea, normalmente se saben caer de esta, son muchos ¿no?”.

Referencias
Carta de Marino Vuelta a Hugo Chávez. Mar del Plata 3-11-2005
Entrevista a Alberto Aníbal Vuelta

Fuente: Centro de Estudios Hernández Arregui

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