Durante la tarde de ayer, el superministro y varios de sus funcionarios presentaron el régimen de modificación de porcentajes arancelarios de exportaciones para el sector.
Redacción
El superministro casi presidente, Sergio Massa, acompañado del secretario de Industria y Desarrollo Productivo y cuadro de la UIA,José Ignacio de Mendiguren, junto al multifacetico y polifuncional secretario de Comercio, Matías Tombolini, anunciaron un mecanismo por el cual las empresas automotrices que aumenten su volumen de exportaciones, pasarán a pagar el 0% de aranceles por las ventas incrementales hacia exterior a partir de enero de 2023.
Según el superministro casi presidente, la medida se fundamenta en que el Gobierno debe acumular reservas en dólares, y dado que el sector va a tener una balanza comercial positiva en el último trimestre del año de 400 millones de dólares, es propicio llevar adelante la iniciativa. De esta manera, según el anuncio, hasta el 31 de diciembre del corriente, tanto las terminales automotrices como las autopartes abonarán la alícuota actual del 4,5 y 3% según el caso; y hasta el monto facturado en 2020. Luego de ese plazo entrará en vigencia la nueva disposición.
La medida busca incentivar los acuerdos de exportación entre las empresas, y el Gobierno desea posicionar al país en la división internacional del trabajo dentro de la cadena global de la actividad. En tal sentido, Argentina es un país principalmente de ensamble y exportación de unidades terminadas; registrando un bajo porcentaje de “integración nacional”, es decir de partes fabricadas y diseñadas íntegramente en el país.
Por otra parte, De Mendiguren se comprometió a agilizar el régimen de auditorías para las autopartes establecido en la Ley de Autopartes. El funcionario, manifestó que se trabajara para duplicar las inspecciones y auditar solamente el 40% de las piezas y no el total como establece la normativa vigente.
También hizo uso de la palabra, el secretario general de SMATA, Ricardo Pignanelli, quién llamó a retomar el rumbo de la integración nacional en el sector y llevarla al 55%, lo que le daría a la actividad “un equilibrio eficaz» según palabras del gremialista.
Lejos ha quedado evidentemente, la concepción industrialista nacional; la cual supo lograr que los niveles de fabricación en el país superaran el 80%.
En fin… liberales.
Fuente: Télam