La cadena porcina ha encontrado un rumbo positivo en los últimos años, aunque no sin dificultades. La consolidación en el mercado interno de la carne, ha servido también para no perder el consumo de proteínas por parte de la población. El problema de siempre son los precios internos de la cadena, y por ende, su traslado al mostrador.

Redacción

El sector porcino consolida su repunte de los últimos años, a partir del aumento del consumo en el mercado interno. La carne, lentamente se va convirtiendo en un sustituto de la carne de vaca. No porque el gusto argentino haya cambiado, sino por el costo del bovino.

Técnicos del Instituto nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) aseguran que tanto la producción de animales como la faena creció en los últimos años, a pesar de los vaivenes económicos; y su “motor fundamental” ha sido el consumo interno nacional.

Aseguran que hoy el argentino consume 17 kilos de carne porcina per cápita por año; de los cuales el 60% son cortes frescos adquiridos en carnicerías o supermercados. Argentina cuenta con un stock potencial de 130 millones de carne de la especie.

Asimismo, desde INTA también dan una mirada del potencial exportador que la carne porcina argentina podría llegar a alcanzar. Hoy nuestro país detenta el 0,4% del comercio mundial de carne de cerdo, la más demandada del mundo.

Los técnicos analizan que los países líderes en ventas externas de este rubro, no son al mismo tiempo productores de granos. Es decir, importan dichos productos como insumo alimentario. Los primeros seis exportadores de carne porcina son: la Comunidad Europea, Estados Unidos, Canadá, Brasil y Chile.

Salvo Estados Unidos que posee producción propia de granos y balanceado, el resto, directa o indirectamente nos compra los granos o el forraje a nosotros. De allí que desde el organismo propongan que Argentina también desarrolle el perfil exportador de la cadena, dado que podría tener un “ventaja” en materia de costos.

Desde la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación (SAGyPN) en febrero pasado lanzaron un programa específico para el sector. Recientemente, mediante la Resolución 196/23, se publicó la nómina de beneficiarios del programa de Fortalecimiento Productivo Argentino Sector Porcino.

Básicamente, la iniciativa consiste en una compensación de $30.000 por tonelada de soja adquirida hasta un máximo de $4.000.000 por productor. Es decir, algo más de 133 toneladas. Tal se comunicó en los últimos días, el programa distribuirá alrededor de 724 millones de pesos.

Justamente, la medida tiende a intentar mitigar la contracara de la aparente “ventaja” de ser un país productor de granos: estos pretenden ser comercializados en el mercado interno al mismo precio que podría exportarse. Por lo tanto, el costo de producción de los animales se encarece, al igual que su carne. Asimismo, el precio internacional del cerdo, no es del todo atractivo para el productor argentino, dado que “arranca” con un costo poco competitivo.

El dólar soja vino a complicar las cosas en términos de los equilibrios de los costos internos, valga la redundancia y la paradoja, ya de por sí desequilibrados. De allí que la SAGyPN lanza estos programas compensadores, pero que no garantizan precio sostén ni para el mercado interno ni el externo.

Es de suponer que los responsables de la cartera tenían conocimiento de tales efectos negativos si se implementaba el “dólar soja”. No hay que ser un experto conocedor del mundo agropecuario ni de la dinámica del mercado interno para darse cuenta. Lo que hizo la SAGyP fue cumplir con las indicaciones de un “orden” superior en jerarquía, que no es el Ministerio de Economía ni el mismísimo Presidente, sino el complejo exportador de cereales, oleaginosas y subproductos.

No hay muchas vueltas. Son seis empresas y cuatro bancos los que organizan desde afuera la totalidad de nuestro sistema productivo.

De allí que es de valorar lo realizado por la cadena porcina. Más allá de los precios en mostrador, críticas y quejas, es trabajo argentino. Es comida argentina.

Fuentes: Boletín Oficial de la Nación / SAGyPN / El Productor Porcino / Revista Chacra