Durante el anuncio de una nueva explotación minera a cargo de una multinacional anglosajona, el actual “superministro” y full-full candidato, reflotó latiguillos noventeros de la UCeDe. Sólo falta que hablen de la “aeroisla”, que vuelvan Xuxa y “Ritmo de la Noche”, y estamos todos.
Redacción
La reunión entre el “superministro” casi Presidente y ahora full – full candidato al puesto, Sergio Massa, y la secretaria de Minería, Fernanda Ávila, con los representantes de la empresa minera anglo-australiana BHP, confirma la explotación por parte de la firma del proyecto Filo del Sol en la provincia de San Juan.
Según fuentes gubernamentales, BHP invertirá 79 millones de dólares para la exploración y posterior desarrollo de la explotación de cobre y plata.
Como era de esperarse, a ambos funcionarios les volvió el alma al cuerpo cuando – tras la confirmación de la operación -, celebraron que la Broken Hill Proprietary Company (BHP), vuelva a la Argentina. Tras varios años de ausencia en nuestro país, luego de vender su parte del proyecto La Alumbrera en Catamarca una vez que ese yacimiento entró en declive productivo y los propietarios debían responder por el pasivo ambiental, la multinacional – en aras de “contribuir a la transición energética” – vuelve a poner el pie en nuestro suelo.
Hubo declaraciones oficiales. Massa reafirmó lo dicho en varios anuncios de este tenor: que este tipo de explotaciones mineras son “un tema central” de la agenda de los próximos años para Argentina, mencionó el asunto del ingreso de divisas – infaltable -, y ratificó que el gobierno trabaja para mejorar las condiciones del sector y darle “estabilidad y certidumbre” en términos de inversiones.
Para no quedarse atrás, Ávila dijo que “es muy destacable que BHP, una de las mineras más grandes del mundo, vuelva a confiar ya invertir en el país”. Fue ella además la que tradujo los argumentos por los cuales el Gobierno nacional permite la nueva radicación en Argentina de la empresa, al afirmar que el país “tiene todo para convertirse en uno de los principales productores de cobre a nivel mundial, un mineral clave para la transición hacia energías más limpias”.
Filo del Sol está ubicado en la provincia de San Juan, a pocos kilómetros de la frontera con Chile, y se extiende a ambos lados de la frontera. De hecho, BHP, posee proyecto de explotación minera en el vecino país e incluso Santiago – su Capital – es una de sus sedes operativas. La firma además, mantiene presencia en Colombia, Brasil y Perú, por nombrar solamente los países de nuestra región.
La propaganda gubernamental viene girando en torno al potencial exportador de la actividad y a la generación de empleo del sector. Es por ello que desde la Secretaría de Minería, se repiten una y otra vez, que en el país se están desarrollando más de 160 proyectos de explotación minera abarcando más de 38.000 empleos.
Sin embargo, afirman también que solamente se encuentran operativos 21 de ellos: 12 abocados al oro; 3 a la plata; 3 al carbonato de litio; además de otros 33 proyectos en procesos de construcción, estudios de factibilidad, y de evaluación económica preliminar.
Prácticamente la totalidad de los que se abocan al oro, plata, cobre y litio son realizados por empresas de los países de la Commonwealth, como Canadá y Australia.
Por otra parte, se cuenta que BHP abandonó el país en 2003, cuando la producción del Bajo La Alumbrera comenzó a estar en declino tras una década de explotación. La Alumbrera cerró sus puertas finalmente en 2022.
Entre sus tentáculos más conocidos, BHP tiene actividad en 25 países, y persigue explotaciones de hierro, carbón, manganeso, diamantes, cobre, níquel, bauxita e hidrocarburos.
Tras los anuncios caemos en la prédica habitual: Argentina no es un país minero más allá de las expresiones de Ávila y el “superministro full-full”.
Argentina es un país con abundancia mineral y metalífera para poder desarrollar su industria y política de atesoramiento, de cara a fortalecer y construir tanto una matriz económica con fuerte impronta de generación de valor agregado industrial, sino también como atesoramiento en las cajas estatales que permitirían contrarrestar cualquier golpe financiero externo.
Pero bueno… Estamos ante el advenimiento de la UCeDe. Volvimos a los 90’s más vintages que nunca.
Fuente: Gobierno Nacional / BHP