La «Diplomacia del Bambú» es un término que describe el enfoque diplomático único de Vietnam en las relaciones internacionales. Esta estrategia toma su nombre de las características del bambú: flexible pero resistente, capaz de doblarse sin romperse ante las presiones externas, y con un crecimiento rápido y sostenido.
Por Tadeo Casteglione*
Para comprender la importancia y estructura de esta estrategia diplomática, es crucial examinar su contexto histórico, principios fundamentales, implementación y impacto geopolítico.
El contexto histórico de Vietnam ha sido fundamental en la formación de su enfoque diplomático. El país ha experimentado siglos de dominación extranjera, incluyendo más de mil años de dominio chino (111 a.C. – 939 d.C.), casi un siglo de colonización francesa (1858-1954), y la devastadora Guerra de Vietnam (1955-1975). Tras la reunificación en 1975, Vietnam atravesó un período de aislamiento internacional hasta 1986, cuando adoptó la política de «Doi Moi» o Renovación, que marcó el inicio de reformas económicas y una apertura gradual al mundo exterior.
Los principios fundamentales de la Diplomacia del Bambú se basan en esta experiencia histórica y en la necesidad de Vietnam de navegar un complejo entorno geopolítico.
Estos principios incluyen:
Flexibilidad estratégica: Vietnam ha demostrado una notable capacidad para adaptarse a los cambios en el panorama geopolítico, ajustando sus relaciones con diferentes potencias según las circunstancias.
Resistencia y autonomía: A pesar de las presiones externas, Vietnam se esfuerza por mantener su independencia y soberanía, evitando alinearse completamente con cualquier potencia.
Priorización del crecimiento económico: La diplomacia vietnamita está fuertemente orientada hacia el desarrollo económico, buscando atraer inversiones y expandir sus relaciones comerciales.
Multilateralismo y cooperación regional: Vietnam participa activamente en organizaciones regionales como la ASEAN y fomenta relaciones con múltiples actores internacionales.
La estructura de la Diplomacia del Bambú abarca varias dimensiones interconectadas. En la dimensión política, Vietnam mantiene relaciones diplomáticas con una amplia gama de países y participa activamente en foros internacionales y regionales. Esta diversificación de relaciones le permite equilibrar las influencias de diferentes potencias y ampliar su voz en asuntos globales.
La dimensión económica es central en la estrategia diplomática vietnamita. El país ha firmado numerosos acuerdos de libre comercio, incluyendo el Acuerdo Integral y Progresivo de Asociación Transpacífico (CPTPP) y la Asociación Económica Integral Regional (RCEP). Vietnam también ha establecido zonas económicas especiales y parques industriales para atraer inversión extranjera directa siendo su principal socio comercial la República Popular China.
En cuanto a la dimensión de seguridad, Vietnam sigue la doctrina de los «Tres No’s»: no a las alianzas militares, no a las bases militares extranjeras en suelo vietnamita, y no al alineamiento con un país contra otro. Esta política le permite mantener su autonomía mientras moderniza sus fuerzas armadas para la defensa nacional.
La dimensión cultural de la Diplomacia del Bambú se centra en la promoción de la cultura vietnamita en el extranjero y el fomento de intercambios educativos y científicos. Esto no solo mejora la imagen del país a nivel internacional, sino que también fortalece los lazos desde múltiples aspectos con otras naciones.
Relaciones con potencias globales
La implementación de la Diplomacia del Bambú se manifiesta claramente en las relaciones de Vietnam con las principales potencias mundiales. Con Estados Unidos, Vietnam ha logrado normalizar las relaciones y desarrollar una cooperación económica significativa, a pesar de su historia de conflicto demostrando el pragmatismo vietnamita mientras su país recibe algún tipo de beneficio de su relación bilateral.
Con China, su vecino del norte y antigua potencia dominante, Vietnam mantiene una relación compleja, gestionando disputas territoriales en el Mar del Sur de China mientras mantiene una importante cooperación económica la cual se ha potenciado en gran manera desde la asunción del presidente To Lam.
Con Rusia, Vietnam ha establecido una asociación estratégica integral que incluye cooperación militar y económica en gran envergadura que muestra también las proyecciones de alineamiento estratégico de Vietnam hacia el BRICS+ y el auge del Sur Global como estructura de construcción alternativa de poder global.
En el ámbito regional, Vietnam ha asumido un papel de liderazgo en la ASEAN y participa activamente en mecanismos de cooperación del Mekong. Esta integración regional le permite a Vietnam amplificar su voz en asuntos internacionales y promover la estabilidad en el Sudeste Asiático. La diplomacia económica es un pilar fundamental de la estrategia vietnamita.
El país ha tenido éxito en atraer inversión extranjera directa y diversificar sus socios comerciales, lo que ha contribuido a su impresionante crecimiento económico en las últimas décadas. Vietnam se ha posicionado como un hub manufacturero importante y una alternativa atractiva en las cadenas de suministro globales.
En cuanto a la resolución de conflictos, Vietnam enfatiza las negociaciones y el derecho internacional, especialmente en lo que respecta a las disputas en el Mar del Sur de China. Este enfoque le permite abordar cuestiones sensibles de seguridad nacional sin escalar tensiones militares.
Importancia estratégica
La importancia geopolítica de la Diplomacia del Bambú es considerable. Vietnam contribuye significativamente a la estabilidad regional en el Sudeste Asiático, actuando como mediador en conflictos regionales y promoviendo la cooperación. Además, su posición estratégica y su política exterior independiente le permiten actuar como un contrapeso a la creciente influencia china en la región, fomentando un orden multipolar en Asia-Pacífico.
El enfoque diplomático de Vietnam también sirve como modelo para otros países en desarrollo. Demuestra cómo una nación puede perseguir una política exterior independiente y pragmática mientras logra un desarrollo económico significativo. El éxito económico de Vietnam y su creciente influencia regional e internacional son testimonio de la efectividad de esta estrategia.
En el ámbito económico global, la Diplomacia del Bambú ha posicionado a Vietnam como un actor cada vez más relevante. El país se ha convertido en un importante hub manufacturero y una alternativa atractiva en las cadenas de suministro globales, especialmente a medida que las empresas buscan diversificar su producción fuera de China. La participación de Vietnam en acuerdos comerciales regionales y globales ha ampliado su acceso a mercados y reforzado su integración en la economía mundial.
Proyecciones hacia el futuro
Sin embargo, la Diplomacia del Bambú también enfrenta desafíos significativos. Las tensiones en el Mar del Sur de China representan una prueba constante para la capacidad de Vietnam de equilibrar sus intereses económicos con su seguridad nacional. La creciente rivalidad entre Estados Unidos y China ejerce presión sobre Vietnam para que se alinee más claramente con uno u otro lado, lo que va en contra de su política de no alineamiento.
Internamente, Vietnam debe abordar el desafío del desarrollo continuo y no detener su maquinaria de desarrollo lo cual podría ser muy perjudicial para sus proyecciones futuras. Además, el país enfrenta presiones internacionales sobre cuestiones de derechos humanos y reforma política, lo que requiere un delicado equilibrio entre las demandas externas y la estabilidad interna.
A medida que Vietnam continúa su ascenso como potencia regional, la Diplomacia del Bambú seguirá evolucionando para enfrentar nuevos desafíos. La capacidad del país para mantener su flexibilidad estratégica mientras navega las complejidades de la geopolítica global será crucial para su éxito continuo.
Podemos observar que la Diplomacia del Bambú representa una estrategia sofisticada y multidimensional que ha permitido a Vietnam emerger como un actor relevante en la escena internacional. Su enfoque flexible, resiliente y orientado al crecimiento ha demostrado ser efectivo en navegar las complejidades del panorama geopolítico actual. La estrategia ha permitido a Vietnam mantener su independencia, promover su desarrollo económico y aumentar su influencia regional e internacional.
El éxito de esta estrategia se refleja en el crecimiento económico sostenido de Vietnam, su creciente perfil diplomático y su capacidad para mantener relaciones constructivas con potencias rivales. Sin embargo, los desafíos futuros, incluyendo las tensiones regionales, las presiones de las grandes potencias y las cuestiones internas de desarrollo y gobernanza, pondrán a prueba la resiliencia y adaptabilidad de la Diplomacia del Bambú.
Mientras que el orden internacional evoluciona, la estrategia diplomática de Vietnam continuará siendo un fascinante caso de estudio en cómo las naciones medianas pueden navegar eficazmente las turbulentas aguas de la geopolítica global. La Diplomacia del Bambú no solo ha transformado la posición de Vietnam en el mundo, sino que también ofrece lecciones valiosas para otros países que buscan mantener su autonomía y promover sus intereses nacionales en un entorno internacional cada vez más complejo.
*Experto en Relaciones Internacionales y Experto en Análisis de Conflictos Internacionales, Diplomado en Geopolítica por la ESADE, Diplomado en Historia de Rusia y Geografía histórica rusa por la Universidad Estatal de Tomsk. Miembro del equipo de PIA Global.
Fuente: PIA