El Norte Grande marcha hacia el acoplamiento con el corredor bioceánico que une desde el Atlántico al Pacífico, los puertos de Sao Paulo, Ilo y Antofagasta. En el medio, materias primas hacia el mundo, zonas francas, y declaración de intenciones industrialistas en base a un plan de obras para consolidar importaciones de productos terminados.
Redacción
Ayer en Salta, hubo un anuncio de campaña pero que trasciende la misma. El “superministro”, presidente en funciones y candidato al puesto, Sergio Massa, encabezó un acto acompañado por el ministro de Transporte, Diego Giuliano, y los gobernadores de las provincias del denominado Norte Grande, con motivo de dar lanzamiento a la “Declaración Güemes”.
La iniciativa según se informó oficialmente, consiste en un plan de inversiones para la generación de energía a través de fuentes renovables. Massa expresó que con la firma de acuerdos en los que el Estado nacional avalará las inversiones acordadas por las provincias con el sector privado para el desarrollo de distintos proyectos en la materia.
El objetivo según se dijo, es que de esos planes se alcance un piso de infraestructura para fomentar la energía solar y la tomar al hidrógeno como “energía argentina” en las energías renovables.
En la misma línea también se abordó la explotación de minerales orientada a proveer la demanda internacional de litio y tierras raras entre otros. Se ponderó la necesidad de transformar industrialmente esa materia prima; aunque Sáenz, el gobernador salteño, fue tan pragmática como su gestión. Afirmó que “el mundo demanda alimentos, minerales estratégicos y energías renovables, y los tenemos en demasía. Faltan las obras de infraestructura, que no las va a hacer ningún privado».
Aquí viene la parte interesante del anuncio. Justamente la mención de las obras y su sentido. El ministro de Economía volvió a repetir la consigna de que el Norte argentino se convierta en el “corazón del MERCOSUR”, a partir de orientar las obras a fortalecer logísticamente la región, plegándolas con el corredor ferroviario bioceánico que une el Atlántico con el Pacífico. Es decir, vincular los nodos logísticos en Tucumán, Güemes y en Formosa, con la iniciativa troncal de transporte que unifica ambos litorales marítimos a través de las cabeceras portuarias.
Justamente, las obras planificadas apuntan a reducir los costos logísticos y tiempos de flete entre los núcleos regionales, además de fortalecer la Zona Franca de Salta.
Por lo tanto, si la estrategia de fondo es dotar de infraestructura energética y transporte para “acoplar” la región al corredor bioceánico, teniendo como centro gravitacional a la Zona Franca salteña, cuesta imaginarse cuál sería el agregado de valor industrial a las materias primas que se exploten en el Norte Grande.
Una zona especial libre de control aduanero operacional al paso de la gran troncal bioceánica, tiene olor a exportación masiva de materias primas en bruto – como se hace actualmente -, e importación de productos terminados sin arancel alguno que “amague” a proteger la industria nacional.
Del acto, que se desarrolló en el Nodo Logístico y Puerto Seco ubicado en la localidad de General Güemes, ubicada a 55 kilómetros de la capital salteña. La construcción del mismo tiene un avance de obra del 75% y se ejecutan a través de un convenio entre el Gobierno de la Provincia y el Ministerio de Transporte de la Nación.
Al evento acudieron los gobernadores de Salta, Gustavo Sáenz; de Santiago del Estero, Gerardo Zamora; de Formosa, Gildo Insfrán; de Tucumán, Juan Manzur; de Misiones, Oscar Herrera Ahuad; de Corrientes, Gustavo Valdés; de Jujuy, Gerardo Morales; de Catamarca, Raúl Jalil; y de La Rioja, Ricardo Quintela.
Los anuncios se dieron en el marco de la campaña electoral que atravesará toda la coyuntura prácticamente hasta fin de año. Eso no nos asusta ni nos horroriza. Lo que preocupa es que el “modelo” no cambia, ni cambiará. Argentina se debate entre los Planes “Rompo Todo” y Parar la Bronca”.
Lo importante, como la producción, el trabajo industrial argentino, y el camino al verdadero pleno empleo, seguirá quedando relegado para tal vez nunca mientras se continúe abrazando apasionadamente la situación de semicolonia.
Fuente: MEcoN / Télam