Días pasados anunció la operación de compra venta de dos de las centrales termoeléctricas que abastecen CABA y la zona metropolitana, que estaban en manos de la estatal italiana ENEL.
Redacción
Tendría que haber sido un escándalo de alcances internacionales, pero dada la coyuntura política (todos de campaña), la cosa pasó derecho al olvido, a pesar de que cerca de 40.000 usuarios habían estado sin energía eléctrica durante una semana.
La empresa de capitales argentinos, Central Puerto, adquirió el paquete accionario de ENEL, correspondientes a las instalaciones de Central Costanera y Central Dock Sud. Según se informó, la empresa propiedad de Reca, Ruete Aguirre, Miguens-Bemberg, y Eduardo Escasany, adquirió el paquete accionario de las centrales que estaba en manos de la empresa estatal de energía Italiana ENEL – que además es propietaria de EdeSur y de parte de El Chocón -.
La operación, habría implicado 102 millones de dólares. Específicamente, la operación implico el 75,7% de Central Costanera, y el 41,2% de Central Dock Sud.
También se dijo que Central Puerto, se convertiría así, en la empresa de mayor volumen de generación eléctrica del país; aunque es un dato de mercado que deberá corroborarse con CAMMESA. Supuestamente, la nueva titular, sumará una potencia instalada de 2305 MW -a sus ya 4809 MW- y así aportará un total superior a los 7.100 MW al Sistema Argentino de Interconexión (SADI). Es, tal vez, el mayor representante de la multinacional Siemens en Argentina.
Central Puerto posee además, otras dos plantas de generación en la Ciudad de Buenos Aires – detrás de Retiro -, llamadas Puerto Nuevo y Nuevo Puerto, que combinadas suman 1500 Mw. Cuenta también con las turbinas de la Central Hidroeléctrica Piedra del Águila, al límite entre Neuquén y Río Negro, con 1400 Mw. La empresa asimismo, es la principal accionista privada de Central Vuelta de Obligado S.A., Termoeléctrica José de San Martín S.A. y Termoeléctrica Manuel Belgrano S.A., las que operan una potencia total de 2554 Mw. Además, está el parque eólico La Castellana, con una capacidad de 100 Mw; Central La Plata, proveedora de YPF.
Más allá del “tachín-tachín” empresarial, Central Costanera alcanza casi el 6% de participación en la potencia instalada total del SADI y genera la energía demandada por 3,5 millones hogares en todo el país. La de Dock Sud, por su parte, posee y opera una central eléctrica a gas ubicada en el distrito de Avellaneda de Buenos Aires, con una capacidad instalada de 870 MW.
A partir de ahora, Central Puerto y ENEL son socios directos. Por un lado, el Grupo italiano opera la central hidroeléctrica de 1.328 MW Enel Generación El Chocón, donde central Puerto posee alguna participación como representante asociado de Siemens; además de ser pares en la integración horizontal de la cadena.
ENEL, a través de EdeSur, distribuye y vende energía a alrededor de 2,6 millones de clientes en Ciudad de Buenos Aires y 12 partidos del Gran Buenos Aires. Durante la semana, a raíz de los cortes de servicios, fue sancionada entre multas y compensaciones por alrededor de 301 millones de dólares.
Sus socios, por las dos termoeléctricas, ya le pasaron el dinero para cubrir un tercio de la deuda. La operación tendría que haber suscitado un escándalo de proporciones, habida cuenta de las graves denuncias que vienen recayendo contra ENEL en el país.
Tal vez, la idea gubernamental sea que la italiana venda todo, pague lo que debe y se mande a mudar del país; antes que intervenir sus empresas y retirarle las concesiones.
Es un año electoral y la campaña ya empezó. Los liberales al frente del Ejecutivo no quieren atender un frente que sólo requiere la nacionalización del 100% como única solución definitiva.
Fuentes: Argentina.Gob / CAMMESA / Central Puerto