Seguidamente, reproducimos un extracto de las declaraciones realizadas por el referente nacional de ACARA, respecto a la situación de la industria automotriz nacional, su nivel de integración local; y fundamentalmente, el por qué la venta de autos puede tomarse como un termómetro de la situación media que vive el país.
Redacción
Ricardo Salomé es presidente de la cadena de concesionarias de venta automóviles “Auto Haus”; y además titular de la Asociación de Concesionarias de Autos de la República Argentina (ACARA). Según él, la relación entre sueldos y el valor de los vehículos, es un buen parámetro para estimar cuál es la situación económica media de las familias argentinas.
Salomé manifestó a “I+I Córdoba”, que hoy se necesitan 41 salarios para comprar un auto del segmento menor. Antes de la pandemia, el parámetro rondaba los 20 salarios; y en la última etapa de boom de venta de automóviles -entre 2013 y 2014 -, eran necesarios 13 sueldos.
Según el empresario, ese año ocurrió un récord de 960 mil vehículos patentados con un 30% de autos nacionales y un 70% de importados, a pesar de que la ley de autopartes vigente, establece un mínimo del 45% de partes nacionales. Luego de la pandemia, el patentamiento descendió 350 mil vehículos, y éste año tal vez de llegue a los 400 mil.
Salomé también hace hincapié en una situación internacional que puede ser oportunidad para Argentina – esto lo decimos nosotros -, dado su potencial técnico: En 2021, a nivel internacional se fabricaron 15 millones de autos menos por el problema de los microchips. Cada vehículo – que hoy son computadoras con ruedas, lleva alrededor de 3.500. Microchips que también son el alma de celulares, computadoras, televisores, para todo lo que sea digital.
“Las casas matrices – explica Salomé – van definiendo dónde destinan esos microchips. Y acá en Argentina, con la restricción de divisas, tenemos importaciones alicaídas. Esperábamos terminar el año con 200 mil autos de importación más 20 mil para reestructurar los stocks, pero creemos que finalmente será igual a 2021 con unos 180 mil importados que da unos 15 mil mensuales. En el último mes tuvimos 13 mil”.
En criollo, la industria automotriz no posee autonomía respecto del ritmo y volumen de su productividad. De allí que los empresarios le ruegan al Gobierno que liberen la importaciones para la oferta de autos esté al nivel del mercado actual – ya de por sí – muy deprimido.
De allí también, que desde ACARA están rogando que China no invada Taiwán: de allí sale el 80% de los microchips del mundo. Si el flujo se interrumpe, se interrumpen varias cadenas manufactureras y comerciales, entre ellas la automotriz.
Los datos aportados por Salomé nos sirven para pensar un poco en argentino. Ya desarrollamos alguna vez porque INVAP y la CONEA estaban en condiciones de desarrollar la industria nacional en materia de semiconductores – o sea, microchips -. Necesitamos hacer 700 mil autos por año de mínima. Cada auto lleva 3.500 microchips. Saque la cuenta. Además, súmele los que van en celulares, teléfonos, computadoras, etc…
Está servida…
Fuente: I+I Córdoba