El servicio de tren de carga internacional entre la Argentina y Paraguay de la línea Urquiza volvió a funcionar este martes, tras estar suspendido por siete años. La plana de funcionarios del área, lo ven como vehículo para juntar dólares. Vuelve el Gran Capitán a pesar de los liberales que lo gestionan.
Redacción
Luego de los actos protocolares se llevó adelante el viaje de reactivación de la línea fue llevado a cabo pasado este mediodía entre la ciudad de Posadas, en la Argentina, y Encarnación, en Paraguay, a través del puente internacional San Roque González de Santa Cruz.
Las autoridades de la línea Urquiza cargas, remarcaron que la reactivación significa “el retorno a Paraguay después de 7 años que no pasan mercaderías nacionales y más de 11 años que no vienen de Paraguay para acá». Se espera que el ramal vuelva a convertirse en “un pilar que genere trabajo, una reducción en los costos para las economías regionales y en este caso las internacionales, porque que el ferrocarril ruede es un beneficio para todos».

La traza de la línea Urquiza atraviesa las provincias de Misiones, Corrientes, Entre Ríos y Buenos Aires, a lo que se suma nuevamente el tramo que une con Encarnación, con lo que suman un total de 1.500 kilómetros de vías operativas por las que se transportan piedra, raleo, cemento, pasta celulósica y cereal.
Para cumplir con la demanda logística, se necesitan 15 locomotoras y casi mil vagones y se cuenta con una dotación de 571 trabajadores. Actualmente la producción que transporta la línea Mesopotámica supera las 40.000 toneladas mensuales cuando en 2019 apenas alcanzaban las 25.000.

Desde el ministerio de Transporte y Trenes Argentinos cargas, evalúan que el impacto sobre la economía argentina será directo: los nuevos flujos comerciales que se vayan generando con Paraguay se traducirán en divisas genuinas para el país.
Más allá de que los funcionarios estén monotemáticos y la bajada de línea sea que deben juntar dólares para pagarle al fondo y tener respaldo financiero para la operatoria del mercado, nos pone contento que el tren vuelva a funcionar: significa trabajo y justicia social.

Fuente: Télam