Producida por comunidades de la Puna jujeña, se logró embarcar el primer lote casi 125 toneladas de fibras, adquiridas por la firma italiana Loro Piana Spa.
Redacción
Desde el gobierno de Jujuy se festejó la transacción ya que la misma derivó de un programa productivo que data desde 2009 – y para el cual se creó una ley provincial específica – , que a grandes rasgos, impulsa, fomenta y establece que la fibra de vicuña debe obtenerse mediante el ancestral sistema de “chakus”. Es decir, animales que en estado silvestre, son encerrados temporalmente, se procede a su esquila y nuevamente son liberados.
Un sistema similar al “chakus” viene impulsándose en la localidad de Gregores en la provincia de Santa Cruz, pero alrededor del guanaco. En ambos sectores del país, y alrededor de los camélidos, es como se puede garantizar la obtención de fibras para la industria textil, sin directamente depender de sistemas de pastoreo o se gestión integral de la cadena ganadera, como sucede con ovinos y caprinos.
De esta manera, el primer lote de fibra de vicuña producida por comunidades de la Puna jujeña, partió a Italia. El envío alcanzó los 124.665, y por el que la provincia y las comunidades asociadas al programa obtuvieron más de 58 millones de dólares (a razón de U$S 468 por kilo).
En el programa hay 16 comunidades originarias asociadas; y durante la última campaña fueron capaces de practicar el “encierre” de 4 mil vicuñas. Se estima que dentro del territorio jujeño existen 150 mil animales en estado silvestre sobre las cuales se puede implementar este sistema.
Nota del Editor: Si el sistema se implementara seriamente y desde una perspectiva integral, permitiria al mismo tiempo realizar un control sanitario de los camélidos en el territorio nacional; al tiempo que con el recurso obtenido, poder tecnificar la cadena lo suficiente para pasar de la exportación de la fibra en bruto,a la confección de alta costura para elcual la materia prima tiene destino final.

Fuente: Télam / Gobierno de Jujuy